Hace años encontramos en la comarca de Las Merindades este rincón privilegiado, escondido entre el río Ebro y la montaña, en él estaba un viejo molino harinero y la casa de los molineros, los dos edificios han sido restaurados con materiales propios de la zona y la posada, acondicionada para una estancia perfecta incluso en los fríos días de invierno.
Estamos fuera del pueblo, con lo que salir de la casa, significa estar en medio del campo, dejando que la naturaleza acaricie todos tus sentidos, escuchando el sonido del río, viendo a los Buitres Leonados domar el viento, respirando todo este aire puro impregnado de fragancias y sintiendo el tacto de la corteza de viejos árboles que llevan clavados en esta tierra muchos años.
Distribución
- Dormitorios: 6
- Camas dobles: 2
- Dormitorios dobles camas individuales: 4
Al igual que la construcción de la Posada, hemos procurado vestirla en su interior con muebles y elementos antiguos y restaurados.
En la planta baja, el recibidor, con una pequeña biblioteca, especializada en libros de rutas, aves y etnografía de la comarca, nos da paso al salón con chimenea francesa y comedor con capacidad para doce personas, ó dieciocho en el caso de grupos.
La escalera de olmo da acceso a la primera planta en la que se encuentran las seis habitaciones, al ser todas tipo dúplex, se entra primero en un salón privado y en la planta superior está el dormitorio y el baño con bañera, esta planta superior está abuhardillada y cuenta con una gran ventana en el tejado que aporta luz y romanticismo en las noches con luna.
Tenemos habitaciones con camas de matrimonio y otras con dos camas, en cualquiera de los dos casos las camas son amplias y vestidas con sábanas y colchas de algodón.
Todas las habitaciones tienen la posibilidad de instalar camas supletorias, por lo que la capacidad y distribución puede ser variada, consúltanos para grupos o familias.
En el exterior hay un porche y un amplio jardín al lado del río Ebro, así como un gigantesco nogal que nos da frescor en verano.
En la planta baja, el recibidor, con una pequeña biblioteca, especializada en libros de rutas, aves y etnografía de la comarca, nos da paso al salón con chimenea francesa y comedor con capacidad para doce personas, ó dieciocho en el caso de grupos.
La escalera de olmo da acceso a la primera planta en la que se encuentran las seis habitaciones, al ser todas tipo dúplex, se entra primero en un salón privado y en la planta superior está el dormitorio y el baño con bañera, esta planta superior está abuhardillada y cuenta con una gran ventana en el tejado que aporta luz y romanticismo en las noches con luna.
Tenemos habitaciones con camas de matrimonio y otras con dos camas, en cualquiera de los dos casos las camas son amplias y vestidas con sábanas y colchas de algodón.
Todas las habitaciones tienen la posibilidad de instalar camas supletorias, por lo que la capacidad y distribución puede ser variada, consúltanos para grupos o familias.
En el exterior hay un porche y un amplio jardín al lado del río Ebro, así como un gigantesco nogal que nos da frescor en verano.