La casa El Palomar, restaurada recientemente, fue un antiguo palomar ubicado en el valle del Guadalentín, a espaldas de la civilización y frente a la Sierra de Carrascoy, más conocida como "el costero de Alhama", un lugar para desconectar por unos días de la rutina y lo cotidiano, viajando al interior de la tranquilidad.
No serás el primero; ya los piratas berberiscos lo descubrieron y prueba de ello son los restos de una torre del siglo XII en los aledaños de la casa.
Consta de 2 habitaciones: la de matrimonio ocupa la parte superior de la torre y otra con tres camas individuales. Tiene aire acondicionado, calefacción y chimenea canadiense con leña incluida.
Una cueva natural acondicionada como comedor se encuentra en la parte inferior de la casa, comunicando con la cocina, el baño y el salón (vídeo y tv).